Cerveceria Artesanal

Historia de una Pasión

“La cerveza es la prueba de que Dios nos ama y quiere que seamos felices”
Benjamín Franklin, inventor y político

Nadie conoce realmente la verdadera historia de los eventos que hace miles de años llevaron al hombre al descubrimiento de la cerveza, se podría contar que:

"Hace miles de años uno de nuestros ancestros accidentalmente dejó a la interperie el grano que intentaba para hacer pan, sin saberlo la humedad causó que el grano germinara y el hombre lo molió para hacer su alimento, sin embargo, la noche cayó encima antes de que completara su tarea; otras ocupaciones más apremiantes y placenteras lo esperaban en su cueva, pocos días después recordó su olvidado grano, y debiendo terminar con su tarea de "hacer pan", observó que el pan se había separado en una masa y un líquido. Encontró que había sufrido un cambio espontáneo, descubrió que el líquido era bueno y que producía en él una sensación de bienestar; ese líquido daba una nueva perspectiva a su precaria existencia... este efecto, todavía no sobrepasado y altamente apreciado hasta nuestros días, fue acreditado por él a la "intervención divina". Indudablemente, el vino de grano era digno de los dioses, tanto por su sabor como por sus efectos... de este modo, con la bendición del cielo, la cerveza apareció por primera vez sobre la tierra: ¡Alabado sea El Señor!"

La cerveza es una bebida alcohólica cuya historia se ha ido desarrollando durante los últimos 5000-8000 años. No existe una persona "inventora" de la cerveza e incluso tampoco un pueblo o país que pueda afirmar que fue quien primero comenzó a producirla. Lo cierto es que esta bebida existía en la antigua Mesopotamia, en África, lejano Oriente y América. Cada pueblo fabricaba la bebida en base a su cereal más disponible: cebada y trigo en la citada Mesopotamia, mijo y sorgo en el África, arroz en China y Japón (el "Sake" es una variante de cerveza más que un "vino de arroz") y maíz en América. Los eslavos del norte fabricaron sus bebidas en base a centeno.

Numerosos antropólogos aseguran que hace cíen mil años el hombre primitivo elaboraba una bebida a base de raíces cereales y frutos silvestres que antes masticaba para desencadenar su fermentación alcohólica; El liquido resultante lo consumía con deleite para relajarse. La mención más antigua de la cerveza, "una bebida obtenida por fermentación de granos que denominan siraku", se hace en unas tablas de arcilla escritas en lenguaje sumerio y cuya antigüedad se remonta a 4.000 años a.C. En ellas se revela una fórmula de elaboración casera de la cerveza: se cuece pan, se deshace en migas, se prepara una mezcla en agua y se consigue una bebida que transforma la gente en "alegre, extrovertida y feliz".

Desde Oriente Medio, la cerveza se extiende por los países de la cuenca oriental del Mediterráneo. Los egipcios, recogiendo los métodos sumerios, elaboran una cerveza que bautizan con el nombre de "zythum", descubren la malta y añaden azafrán, miel, jengibre y comino con objeto de proporcionarle aroma y color. Y si entre los romanos y los griegos fue considerada una bebida de a gente llana, los pueblos del norte de Europa festejaban con cerveza las fiestas familiares, las solemnidades religiosas y los triunfos sobre sus enemigos.

En la Edad Media nacería la "cerevisa monacorum", cerveza de los monjes con denominación de origen, cuyo secreto guardaba celosamente cada fraile boticario. Los monjes lograron mejorar el aspecto, el sabor y el aroma de la bebida.

Entre los siglos XIV y XVI surgen las primeras grandes factorías cerveceras, entre las que destacan las de Hamburgo y Zirtau. A finales del siglo XV, el duque de Raviera Guillermo IV promulga la primera ley de pureza de la cerveza alemana, que prescribía el uso exclusivo de malta de cebada, agua, lúpulo y levadura en su fabricación.

La auténtica época dorada de la cerveza comienza a finales del siglo XVIII con la incorporación de la máquina de vapor a la industria cervecera y el descubrimiento de la nueva fórmula de producción en frío, y culmina en el último tercio del siglo XIX, con los hallazgos de Pasteur relativos al proceso de fermentación.

Los orígenes de la cerveza se pierden en la noche de los tiempos entre historias y leyendas; las del antiguo Egipto atribuyen su origen al capricho de Osiris.

Una vez embebida de agua, la cebada se deja germinar a fin de que el almidón se convierta en azúcar soluble. Una vez conseguido este proceso, se seca y se tuesta más o menos, según se quiera obtener una cerveza pálida, dorada o negra.

Para conseguir ese paladar amargo que caracteriza a la cerveza, se le añade lúpulo o, más exactamente, su flor, un cono de pétalos dorados que contiene resinas y aceites aromáticos.

Para conseguir la mezcla de ambos sabores, se añade el lúpulo durante el proceso de ebullición de la cerveza, en las tinas de cobre, al tiempo que también se adiciona el azúcar. Sin la presencia del lúpulo, la masa en ebullición o Wort podría utilizarse para la destilación de whisky.

Si la cerveza tiene mucho gas carbónico, ya sea natural o añadido, se denomina "Lager". La "Stout" es oscura y densa, algo dulzona, característica de Irlanda e Inglaterra. La "Bock" es densa y guarda algo de aroma de las levaduras. La cerveza clara es una clase inglesa, suave, endulzada y con intenso sabor a lúpulo.

Desde 1945 la industria cervecera ha logrado un gran desarrollo; entre 1945 y 1965 se duplicó la producción mundial. El aumento de la producción y del consumo ha sido notable en países como Japón, URSS, México y España, por supuesto aca en ARGENTINA es el brebaje oficial.

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